Libro CREE

Introduccion

Cuando somos niños tenemos nuestra mente abierta, fresca a recibir cuanta información nos encontramos por el camino.

No existen los prejuicios, ni la posibilidad de dudar de lo que vamos descubriendo; esta disposición mental nos abre puertas al infinito, sin ningún tipo de restricción que nos limite a absorber el conocimiento del maravilloso universo en el que habitamos.

Esto se debe a que estamos recién llegados del mundo espiritual, por lo tanto, todo es posible!

Pero a medida que pasan los años, la sociedad, las costumbres, la cultura, los miedos de otros inculcados en nuestra mente infantil, fisura nuestra inocencia. Nos invitan a alejarnos del mundo espiritual y a apegarnos más al mundo físico y nuestra alma aunque nos grita, ya difícilmente la escuchamos…. ha entrado la incredulidad.

Aunque el título del libro es una invitación abierta a que creas y personalmente nada me daría más gusto que sucediera; ya que con cada persona que crea, nos estaremos acercando mas al despertar de la humanidad, de este largo y profundo sueño en el que vivimos, que nos hace percibir solamente la dimensión del 1% de la inmensa realidad que existe en otras dimensiones donde está el 99 %, estoy consciente de que hay muchos factores que determinan ese despertar; entre ellos, el grado de evolución de las almas, lo dispuesto que estés al despertar y por supuesto el derecho divino que te dio el creador, tu libre albedrio (el derecho a elegir).

También estoy consciente, de que mi trabajo es darte el mensaje, lo que hagas tu con la información es asunto tuyo. Así que de este libro, toma lo que consideres que necesites, se adapte a tu filosofía de vida, te ayude a tu crecimiento espiritual y personal, el resto deséchalo.

Por lo tanto, dicho esto, con mucho amor, emito las siguientes palabras que espero sean bien interpretadas.

Tengo un mensaje para ti, pero depende de ti lo que hagas con este mensaje, lo puedes interpretar como lo que es un tesoro o ponerlo en la basura, la decisión es tuya. 

“El que quiera creer que crea; y el que quiera negarse a creer, que no crea”. 

Cree! Believe!